Radio interactiva

En estos días he estado escuchando algunos de los programas que se hacen en horas de la mañana en la radio de Santiago.
  
 Confieso que aunque muchos me habían hablado sobre estos programas mañaneros no había tenido la oportunidad de ponerle la debida atención y quedarme pegada escuchando la particular programación.
   
Todos con una temática muy parecida y un lenguaje un tanto soez para el horario que se realiza, pero donde se abordan temas muy cotidianos y realistas que nos ayudan a entender gran parte de la realidad que vivimos.
   
Lo que sí es bastante plausible y admirable es la gran audiencia que conservan y la acogida que han tenido en el público matutino, que por lo regular escucha radio a tempranas horas de la mañana. 

Los jóvenes conductores abordan tópicos un tanto espinosos, algunos cargados de sátiras y otros de gran realidad, donde la gente se expresa, opina y hasta en ocasiones se pasa de la raya con comentarios un tanto subidos de tono y expresiones despectivas.
   
Pero lo cierto es que estos programas, sin lugar a dudas, son un toque de queda en barrios de Santiago, carros públicos, taxistas, restaurantes populares, cafeterías y lugares similares, donde la gente se divierte y se ríe bastante con las ocurrencias de los conductores y los radioescuchas. 

En el extranjero también tienen una gran audiencia cautiva que los sigue a través de las redes sociales. Los segmentos que tienen responden a la necesidad chabacana y pueril que se está viviendo hoy en día entre la juventud, por lo que resulta risible escuchar a personas dando su número de teléfono en el aire en busca de una pareja, entre otros secciones que nos divierten hasta más no poder.
   
Ojalá que este tipo de espacios radiales se sigan desarrollando en varias emisoras de Santiago y la región, aunque entendemos podrían mejorar un poco el vocabulario que se utiliza por el horario matutinito en que se realizan, al igual tener cierto decoro con los temas tratados.

Por: Marilyn Ventura