La respuesta de Marilyn Ventura para Ricardo Rodríguez Rosa


La vida me ha enseñado a no mirar a los lados cuando se trata de detenerme acechar la competencia y emular negativamente lo que ellos hacen con creatividad y entrega.
    
La vida también me ha ensañado a enfocarme en lo mío y a entender que mientras algunos aplauden mis conquistas a otros les duelen mis logros.
    
Esa misma vida que me ha tocado vivir también me ha mostrado el lado oscuro de muchos que te saludan con un beso en la mejilla,  sin embargo te destruyen con sus críticas mal intencionadas.
    
Esos mismos que no han podido vencer sus miedos y mediocridades son los que no han entendido que la vida es cíclica y los cambios necesarios.  Que la juventud avanza y que ellos cada día se ponen más viejos y desactualizados. 
    
Quizás la única arma que tengo para defenderme en éste momento sea mi pluma, pero también agradezco a Dios que mis hechos y mi credibilidad son mi carta de presentación donde quiera que llego. 
    
Al parecer actuar con apego a la dignidad y el respeto en una carrera de 18 años de ejercicio periodístico, no son suficientes para aquilatar y valorar en su justa proporción el trabajo que con esfuerzo y sacrificio se hace prácticamente de manera milagrosa. 
    
No obstante a esto trabajar con todo tipo de limitaciones y salir airosa con un manojo de felicitaciones de los que en verdad saben apreciar los esfuerzos.   
   
Procuremos que nuestros actos hablen de nuestro legado, de lo que somos y queremos dejar cuando ya no estemos físicamente. Procuremos inspirar respeto no miedo, ser confiables no despreciables, en ser justos no mezquinos, en ser líderes no jefes, en ser humildes no creídos, en ser gente no bufones, en ser nobles de corazón no hipócritas serviles.