Por:Nurys Rivas
¿Qué derecho piensa Bill De Blasio que le asiste para pedir un boicot contra el turismo dominicano? Será que está siendo víctima de un mal momento, Dios me libre imaginar que sus declaraciones son fruto de un incontrolable lapsus etílico, o quizá piensa que nuestra isla aún está habitada por indígenas, ya se habrá dado cuenta de cuán grande ha sido su error, le están lloviendo críticas y reclamos, a ver cómo va a solucionar esa “metida de pata” que le deja tan mal parado.
Sus insultos son inmerecidos y crueles por demás, ¿qué pretende al hacerlo? No creo que ni instituciones ni personas civiles de ninguna parte apoyen su ultraje contra este país que solo está normalizando una situación irregular desde hace mucho tiempo, como lo hace su país “alcalde De Blasio”, cuyas pesquisas en contra de los indocumentados son tan drásticas que de las anécdotas angustiosas que desprenden, han salido películas y libros.
Dígame entonces de ¿qué presume usted Alcalde, qué pretende con esta petición injusta y ridícula, por qué en lugar de semejante agravio no intenta hacer un acto de justicia, proponiendo a su país que acepte unos cientos de esos haitianos a los que ya nosotros francamente no podemos continuar amparando?, sea generoso De Blasio y ayúdeles usted, “quien mejor que el Alcalde de un estado americano, la nación más poderosa del mundo”.
Que cómodo resulta acusar y mostrar al mundo una mentida solidaridad que solo República Dominicana ha hecho real y efectiva con el pueblo haitiano, no solo hoy ni ayer, sino siempre.
Le regalo un consejo, “Alcalde entrometido”, no continúe difundiendo que los dominicanos queremos salir de los haitianos porque son negros, eso no se lo cree Dios Alcalde, los dominicanos somos tan negros como los haitianos, es ridículo que se diga que les despreciamos por su color, son ustedes, “los rubitos ojiazules” de su país quienes desprecian a la gente de color. Céntrese por favor, admita su error y presente disculpas.
