Grabado o en vivo


Por: Marilyn Ventura
Periodista

En estos días tuve la oportunidad de disfrutar de varios artistas en vivo y a la vez medir la calidad interpretativa de cada uno de ellos.

    
Esto no es un secreto para nadie que cuando se graba en estudios de grabación se utilizan ciertos filtros y matices tecnológicos para afinar o suavizar la voz de quienes no han sido tan agraciados con unas prodigiosas cuerdas vocales.
    
El hecho de recurrir a estas herramientas es muy válido, ya que quienes buscan proyectarse a través de la radio, la televisión o el internet necesitan de una voz limpia y depurada para agradar los sentidos de los escucha.
    
Sin embargo cuando llega el momento de presentaciones en vivo se torna un tanto difícil para el artista que no cuenta con las condiciones vocales necesarias para ofrecer el mejor de los espectáculos sobre la tarima.
    
Muchos entienden que son improvisados del canto, sin ningún estudio ni preparación académica, a pesar de ocupar posiciones cimeras en el gusto popular y los primeros lugares en la radio nacional.
    
Es por esto que al momento de escucharlos en vivo se torna una especie de decepción colectiva de quienes se crean un mundo ficticio e irreal sobre ciertos exponentes que no poseen ni las más mínimas condiciones para interpretar una canción.
    
Suele ser perjudicial para el artista, pero a pesar de esto entendemos que todo depende del género que interprete, ya que se han dado muchos casos a nivel mundial donde artistas no cuentan con una gran voz sin embargo poseen un gran carisma e impacto en el público.