Por: Marilyn Ventura
En estos días ha estado circulando una lista de féminas de los medios, quienes son consideradas como las “actrices” más cotizadas del cine dominicano.
Me resulta un tanto extraño, ya que muchas de ellas no son actrices de profesión ni mucho menos, sino figuras de la televisión nacional, pero al parecer se han colado entre las más valorizadas.
Entiendo la lista responde algunos intereses, sin embargo estoy de acuerdo que mujeres como Cheddy García y Charityn Goico y las jóvenes Paula Ferry y Cristal Jiménez, que han entregado parte de sus vidas a las tablas y a estudiar actuación, aparezcan en el controversial listado.
No entiendo como Cecilia García, Lumy Lizardo, Hony Estrella y otras grandes profesionales del área ni sus luces aparecen en el inventario.
Otras, que nunca entendí que hacen en el conteo, han tenido muy buenas participaciones en producciones cinematográficas criollas, pero podrían seguir preparándose para lograr actuaciones más orgánicas.
La pregunta del millón sería, si en la República Dominicana se podría hablar de una plataforma tan amplia como para compararnos con otros mercados internacionales, donde si existe la cotización para contratar una actriz para una película.
Pienso nos falta mucho por hacer en ese plano para hablar de valoración de una actriz, debido a que un simple pago por una película que haya participado no podría medir ni determinar su costo fijo en el mercado.
Nos imaginamos esta decisión final se toma dependiendo mucho del productor, director, guionista y el momento que vive esa actriz dentro de la industria del entretenimiento, pero sobre todo el aporte histriónico y en términos de popularidad que le pueda aportar esa figura a la producción.
