No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos. Zacarías 4:6 (b).
El ímpetu con que suele comenzar un proyecto, en cualquier escenario que se elija para ejecutarlo, tiende a disminuir en la medida que pasa el tiempo, a presentar otra realidad, la otra cara.
De ahí que, constantemente vemos cosas que tuvieron un comienzo espectacular, pero ahora surgen más cuestionamientos a la deriba que el potencial que se veía en el principio.
La sabiduría popular, que da seguimiento a lo que se mueve en la sociedad, siempre hace suya las enseñanzas que van dejando las experiencias vividas producto de las actividades humanas.
Muchas veces las emociones y las palabras terminan en frustraciones y desengaños al aparecer, raudo, el otro lado que no fue mostrado en el principio, pero que fugaz, aparece en el final.
Para hacer acuerdos e integrarse a un proyecto de trabajo o escuchar alguna propuesta con un fin determinado hay que orar a DIOS a ver si eso que se propone conviene hacerlo, dar un si es riesgoso y aventurero si no se cuenta con la aprobación de DIOS.
Dice la Palabra de DIOS "Todo me es lícito, pero no todo conviene, todo me es lícito, pero no todo edifica". 1 Corintios 10:23.
Como la humanidad decidió desde su principio montarse en el tren de las aventuras, mentiras y desengaños, desobedeciendo a DIOS quien había trazado un plan perfecto para bendecirla, Su Palabra nos aconseja: "Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo". 1 Juan 4:1.
Un amplio sector de hombres y mujeres viven en medio de la desesperanza y la frustración después de ver la verdadera realidad detrás de propuestas falsas.
Un socorrido dicho popular proclama: "Las aguas se aclaran solas al paso de la corriente", pero DIOS dice: "No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos". Zacarías 4:6 (b).
Consulta al Señor en oración cualquiera sea el paso a implementar!!!
