Por:Marilyn Ventura
Definitivamente los tiempos cambian y las nuevas generaciones van emergiendo con una fuerza increíble, a tal punto que estos traen sus nuevas tendencias y las imponen naturalmente.
Este mismo fenómeno de cambios e innovaciones está aconteciendo en estos momentos dentro de la música que se está escuchando en las emisoras y a través de la plataforma virtual.
Ahora nos ha caído como de la nada el llamado “trap”, que no es más que una mezcla de hip hop con música electrónica, caracterizada por un sonido agresivo y una lírica realmente ardiente.
Muchos son los exponentes que se han lanzado a este género, el cual sin esperarlo ha logrado gran impacto especialmente dentro de la juventud.
Y digo sin esperarlo, ya que los amantes de este género son netos y puros. No varían, apuestan a este ritmo y mueren por él, son invariables y para ellos su género es intocable.
Ahora bien, lo triste de esta historia es que el “trap” que estamos conociendo en voces como la Anuel, Bryan Myers y Bad Bunny es sin lugar a dudas una música para adultos, donde las malas palabras y el llamado a lo ilícito es la carta de presentación.
No quiero anular el género por completo, debido a que los seguidores del trap son infinitos a nivel mundial, lo que espero de todo corazón es que el género pueda dar un giro en sus letras y dejar de lado los eufemismos que se utilizan descaradamente dentro del ritmo.
Para algunos resulta imposible escuchar uno de estos temas, donde las partes íntimas tanto del hombre como de la mujer se llaman crudamente, donde hacer el amor es una promiscuidad y donde se incita a consumir drogas e involucrarse al mundo del narcotráfico y lavado de dinero.
