Por:Marilyn Ventura
En ocasiones los seres humanos tomamos decisiones que en su momento podrían resultar un tanto absurdas o no ser las más acertadas.
Entiendo, esto acontece cuando no pensamos bien las cosas antes de actuar o quizás nos dejamos llevar por consejos de otros que no visualizan el futuro de la mejor manera.
Tomar una decisión, más cuando se trata de algo importante en nuestras vidas, siempre deberá estar acompañado del análisis, el comedimiento y la cordura para escoger el mejor de los caminos.
La reflexión debe primar, tomarnos el tiempo necesario para sopesar los pro y los contras, no actuar precipitadamente, todo lo contrario, actuar con juicio y prudencia.
Traigo este tema a colación debido a que nueva vez el cantante de merengue Rafely Rosario ha anunciado su entrada a la agrupación de su padre Rafa Rosario.
Después de salir de Los Hermanos Rosario para emprender un proyecto en solitario, el joven artista regresa al grupo de su papá como corista del reconocido colectivo.
Muchos se preguntarán si se trata de un fracaso o de una gran desilusión, lo cierto es que ahora Rafely deja de lado su sueño de tener su propia orquesta y regresa al lado de su padre.
Como moraleja de esta historia nos queda la reflexión si Rafely tomó en aquel momento la decisión correcta y si analizó su paso para lanzarse como solista. Mirémonos en este espejo y demos la real importancia que tiene que pensar antes de actuar.
