UN MALAGRADECIDO LLAMADO ELVIS MARTINEZ

El Sr. Carlos Abreu Propietario de Montecarlo Room uno de los Clubs mas importante de la ciudad de NY, nos informo el día de ayer sobre la gran decepción que sintió por un artista que dio sus primeros pasos en la gran manzana y Dios lo ha premio con el éxito, pero hoy como el gato a perdido la memoria y es un cuervo que a cualquiera le saca los ojos.
Se refiere al Bachatero Elvis Martínez y nos comenta que parece mentira ver tanta prepotencia y avaricia en una sola persona y más si como la mayoría de los dominicanos ha sabido saborear el sabor amargo de la tierra.
El pasado domingo el Camarón de la bachata estaba contratado para presentarse en Montecarlo Room con una tarifa de $9,500.00 Dólares cantidad que desde principio considero muy elevada pero se arriesgo aceptarla. Al ver el poco apoyo del publico se dirigió a contactar a el corredor de Roberto Almonte “Freddy” quien reconoce que en Montecarlo Room no se cancelan Grupos aun tengamos que perder dinero como pasa en muchos casos para complacer mi publico, pero siempre tratamos en situaciones como estas de negociar con el artista solicitándole una flexibilidad que siempre resulta en una baja de tarifa.
Freddy me sugirió llamar al manager de Elvis Martínez pues ellos son algo complicados, quien vino y confirmo una asistencia de apenas una cuarta parte de nuestra capacidad, este reconoció el descule de la actividad y opto por bajar la tarifa a $7,500 y todo estaba bien hasta ese momento, al pasar las 3 ½ de la madrugada pedí que subieran el artista y cuando el manager va donde el Camarón este se negó diciendo, vámonos no vamos a tocar nada y recoge mi dinero.
Le reclame sobre el acuerdo de apenas unas horas, pero el manager insistió que el artista no quiere y solo subirá a tarima si le pagan $1,000 dólares mas y al verme indefenso opte por entregar en total $8,500 dólares, luego indignado con tan miserable actitud fui hasta la tarima y le quise preguntar al camarón delante del publico, el porque? Ya no le interesa cantarle a su público si no que su avaricia solo le permite darle más importancia a su Dinero. Pero este con su actitud ahora de Jefe no me hizo ni caso prefirió ignorarme.
Quiero recordarle al Elvis Martínez que marineros somos y en este negocio andamos, que ojala y cuando las hojas blancas le comiencen a caer aun pueda seguir diciendo con tanto aire de grandeza que es el “Jefe”.
El Sr. Carlos nos adelanto que se están realizando reuniones entre los propietarios de los centros de diversiones de esta ciudad para llegar a un acuerdo que les permita hacerle frente a los altos precios que exigen los Artistas, sabemos que no será fácil por lo complicados que somos los Dominicanos, pero se que lo podremos lograr y entonces otro Gallo Cantara.
Agustin de la Cruz