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A los colombianos ejecutados les tumbaron 98 kilos de cocaína
SANTO DOMINGO.-La Policía arrestó a seis sicarios a quienes acusa de dar un tumbe 98 de kilos de cocaína y dinero en efectivo y luego asesinar a cuatro colombianos, un español y un dominicano, en hechos criminales perpetrados por separado, pero con la misma arma de fuego.
Se trata de los peligrosos narcotraficantes y sicarios José Amable Morel Ventura (Mostruo), Yerry Rafael Heredia Suero, José Uerinton de Jesús Sosa Acosta (Sosa), Ramón Emilio Sosa Rodríguez (El Taxista y/o Ramón El Sicario), Miguel Eduardo Díaz Polanco (Ñelo) y Eddy Lantigua (La Melaza).
Por el caso se encuentran prófugos los nombrado Héctor Vargas Valerio (Héctor La Figura) y Julio Cesar Céspedes (a) El Indio.
Por el caso se encuentran prófugos los nombrado Héctor Vargas Valerio (Héctor La Figura) y Julio Cesar Céspedes (a) El Indio.
Entre las víctimas de los prevenidos figuran el español Pablo Fanjul García, los colombianos Carlos Arturo Pedraza García, Serafín Alvarado Bautista y Héctor Elías Peña García y Julio César Sánchez Monterrosa, así como el dominicano Jesús Durán Jiménez (Eronel El Gordo). Todos fueron asesinados con una pistola Glock, la cual alegadamente fue destruida por los perpetradores.
En el curso de las investigaciones se pudo establecer que el autor intelectual de la muerte de los colombianos y el español fue el imputado Morel Ventura (Monstruo), quien trabajaba como distribuidor de grandes cantidades cocaína introducida al país por una red internacional, que era operada en el país por los hoy occisos.
Según la Policía, Ventura tenía una fuerte deuda con los colombianos, por lo que planificó darle un tumbe de unos 600 kilos de cocaína, lo cual se ejecutó el pasado mes de agosto, pero sólo obtuvieron 98 kilos de la droga.
Mientras era planificado el tumbe a los colombianos, los prevenidos confrontaron problemas con el español Fanjul, debido a que sospechaban que trabajaba de informante para las agencias antinarcóticos.
En efecto también ejecutan al español Fanjul a plena luz del día el pasado 25 de agosto en las proximidades de su residencia, ubicada en la calle E. León Jiménez 157, de esta ciudad de Santiago.
Los investigadores comprobaron, mediante estudios balísticos, que el arma utilizada para matar al español Fanjul fue la misma con que se ejecutó el asesinato de Durán Jiménez (Eronel El Gordo). Estas muertes fueron ejecutadas por el imputado Heredia Suero, quien es señalado como el principal pistolero del grupo.
Por el asesinato del español Pablo Fanjul, perpetrada el 25 de agosto, el imputado Morel Ventura (a) Monstruo pagó la suma RD$ 400, 000.00 al imputado Heredia Suero, quien sin tener trabajo, logra tener una vida de abundancia sustentada en los recursos producto de la actividad de sicariato que realizaba.
Tras esta acción criminal, los imputados Morel Ventura (a) Monstruo, Vargas Valerio (a) Héctor La Figura (prófugo) y Díaz Polanco (a) Ñelo, deciden que el tumbe y asesinato de los colombianos antes citados no podía esperar un día más. Para tales fines se reúnen la tarde del mismo día 25 agosto en la autopista Joaquín Balaguer, próximo a Navarrete, con los gatilleros, donde acuerdan materializar la acción contra los colombianos al día siguiente.
Para este “trabajo” contratan los servicios de Heredia Suero, de Sosa Acosta (a) Sosa y Sosa Rodríguez (a) El Taxista y/o Ramón El Sicario, quienes raptan a los colombianos en el apartamento del residencial Torre Kirie, apartamento 6 B, ubicado en la calle Erick Ekman, Los Cerros de Gurabo III, Santiago.
Desde este lugar se trasladaron con los hoy occisos a la casa ubicada en la calle Dr. José Herrera No. 3, de la misma urbanización.
Toda la información sobre la residencia de los colombianos la aportaba el imputado Morel Ventura (a) Monstruo, ya que él era parte esencial de la red internacional, antes del problema de la deuda de la droga, por lo que sabía prácticamente todos sus movimientos.
Tras raptar a los colombianos y torturarlos lograron que estos les entregaran 72 kilos de cocaína que se encontraban escondidos en una residencia de la calle 5 de la urbanización Thomen, de la Barranquita, y otros 26 kilos de la misma droga, que estaban en otra casa rentada por los colombianos.
Materializado el tumbe de los 98 kilos de cocaína, el imputado Heredia Suero (gatillero) y sus cómplices, subieron a los colombianos Serafín Alvarado Bautista, Carlos Arturo Pedraza García, Héctor Elías Peña García y Silvio César Sánchez Monterrosa, al segundo nivel de la casa ubicada en la calle Dr. José Herrera, No. 3, de los Cerros de Gurabo III, donde los ejecutaron utilizando la misma pistola Glock con la que Heredia Suero mató al ciudadano español Fanjul García y al dominicano Duran Jiménez (a) Eronel el Gordo.
El pago
Por la ejecución de los cuatro colombianos, el prevenido Heredia Suero recibió tres kilos de cocaína de parte de Ventura (a) Monstruo, mientras que a Sosa Acosta (a) Sosa, les tocó la suma de RD$250,000.00, los cuales recibió de manos del imputado Díaz Polanco (a) Ñelo.
En tanto que por el asesinato de Durán Jiménez (a) Eronel El Gordo, cometido en el sector Buenos Aires de esta ciudad de Santiago, el imputado Morel Ventura (a) Monstruo, pagó a los sicarios antes señalados la suma de RD$ 300 mil.
Por: El Día
