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Convencidos de que el merengue típico necesita de nuevos colores musicales, el grupo Urbanda llegó a la capital para presentar su propuesta. “Es mentira de que el merengue típico se desvirtúa cuando se le introducen instrumentos nuevos”, es lo que entiende Carlos Tatis, mánager de la joven agrupación merenguera que tiene en el típico su fortaleza.
Y es que ellos entienden que las fusiones y la introdución de nuevos colores musicales le imprimirá mayor fortaleza al género que tiene grandes exponentes como, Bartolo Alvarado, “El Cieguito de Nagua”.
En el caso de esta agrupación, que tuvo su debut al inicio de este año, la innovación ha sido una de sus palabras favoritas y es por eso que entre sus músicos se puede observar una guitarra eléctrica ejecutada por todo un roquero.
“No es verdad que eso desvirtúa al merengue, y le hace perder la esencia. En el caso nuestro estamos trabajando para complacer a todos los públicos, pero tratando de captar un público joven sin dejar de lado la aceptación en los viejetes”, sostiene el representante de Urbanda, que tuvo el pasado miércoles un encuentro con la prensa de la capital por primera vez.
El encuentro
En la actividad, además de presentar el trabajo realizado hasta el momento, el grupo realizó varios números musicales para el disfrute de los presentes.
En la actividad, además de presentar el trabajo realizado hasta el momento, el grupo realizó varios números musicales para el disfrute de los presentes.
“Los muchachos suenan muy bien” se escuchó decir a varios periodistas que asistieron a este encuentro.
La intención de Urbanda con este acercamiento es la de querer “cruzar el peaje” de verdad y que su música pueda viajar más allá de la zona del Cibao, donde según lo jóvenes artístas ya tienen un público cautivo.
“Nosotros iniciamos este proyecto con toda la intención de hacer las cosas diferentes.
Queremos ir más lejos del Cibao, porque sabemos que hay un públco mayor”, reitera Jorge Lewis, cantante de la agrupación.
Y sobre esta situación abundaron que si el género típico siendo más primitivo que otros géneros criollos, como por ejemplo la bachata, no haya trascendido lo necesario, es culpa de los propios exponentes.
“Nosotros reconocemos que si el merengue típico no ha logrado ese repunte que hoy día tiene la bachata que inició siendo un género marginado y ahora se encuentra en lugares y escenarios impensables, es porque los exponentes que han llegado han hecho grandes aportes para que eso suceda”, sostiene Tatis, manejador de Urbanda.
Sus integrantes
Esta joven agrupación típica está integrada por los artistas: Jorge Lewis, (cantante); Nixon Román Núñez, (acordeón); Junior de Jesús Peralta Durán, (Jr cantante); José a. Simé Torres, (cantante); Andy Estévez Calderón, (saxofón); Wilde Alberto Gómez Núñez, (Chichí) (güira); Rafael de Jesús Abreu, (bajo); Johan Manuel Núñez, (conga); Enmanuel F. Cabrera Peña, (piano); Nathan, (guitarra eléctrica) y Ronaldo Morís Carela, (tambora).
Esta joven agrupación típica está integrada por los artistas: Jorge Lewis, (cantante); Nixon Román Núñez, (acordeón); Junior de Jesús Peralta Durán, (Jr cantante); José a. Simé Torres, (cantante); Andy Estévez Calderón, (saxofón); Wilde Alberto Gómez Núñez, (Chichí) (güira); Rafael de Jesús Abreu, (bajo); Johan Manuel Núñez, (conga); Enmanuel F. Cabrera Peña, (piano); Nathan, (guitarra eléctrica) y Ronaldo Morís Carela, (tambora).
Y aunque su nombre es Urbanda, su propuesta no tiene que ver en nada con el género urbano. Aclaran que su música tiene fusiones pero sin dejar la esencia de un buen merengue típico y por ello hacen en su repertorio merengues definidos como más modernos.
Desde su surgimiento, Urbanda se ha paseado por diferentes escenarios de Santiago: Tribecca, Over, SOHO, Rancho Típico Las Colinas, Game Studio, Típico La Tinaja, Andy Ranch, City Ranch, Lovera, Pasión, Club Amaprosan, Club de los Choferes, Montezuma, Sajhara, Two Way y muchos otros.
“Nosotros encontramos una necesidad dentro de este género y hemos venido para complacer al público. Estamos echando el pleito”, dice el corista Lewis.
En el género típico se da una situación que no ocurre en otros géneros tropicales criollos. Nuevos grupos surgen cada cierto tiempo y sus músicos tienen la posibilidad de aceptar tentadoras ofertas.
