Jesús
Gil, “Masa”, aún no se atreve a darle la cara a sus progenitores. Hace
varios días que no habla con ellos desde que provocó el aluvión de
críticas de toda una sociedad que pidió su “cabeza” luego de que en
pleno programa de televisión le agarró las partes íntimas al transexual
Mía Cepeda.
“Estoy triste y arrepentido. Es una vergüenza para mi
familia, para mis amigos, para el medio en el que trabajaba, para la
sociedad y para mí mismo como profesional. Nunca había caído tan bajo en
mi carrera, siento un dolor muy grande en mi alma por lo que he
provocado”, expresó Masa en una entrevista con el periódico elCaribe.
La historia reciente de la
televisión dominicana no registra un caso de tal envergadura (atizado
por las redes sociales) de un presentador que haya faltado a la moral y a
los principios éticos a través de los medios de comunicación. Masa es
el que ha cargado con todo el peso del reclamo que sugiere producciones
de más calidad y que promuevan las buenas costumbres en la pantalla
chica local.
No le ha valido que pida perdón
ante la Comisión de Espectáculos Públicos, las críticas de sus propios
colegas y del público en general han calentado más el panorama
farandulero. El último nocaut que recibió Gil fue de la misma empresa
(Telemicro) que le brindó apoyo durante mucho tiempo, la cual decidió
sacar del aire su programa “0 es 3”, que se transmitía de lunes a
viernes por Digital 15.
“No he tenido tranquilidad
espiritual. Fue algo que yo provoqué, no justifico lo que hice, pero
estoy arrepentido de corazón, no para complacer a nadie, sino a mí mismo
como ser humano y como profesional.
“Toda persona que comete un
error y se arrepiente espera una segunda oportunidad. Sé que la decisión
de Telemicro es velando por las buenas costumbres, para que la
televisión llegue con entretenimiento, pero no con algo aberrante como
lo que hice”, sentenció.
Via:Periodico
elcaribe.com.do