No es lo mismo "Miriam Cruz." sin Teresa

Por más que se haya dicho y escrito sobre la salida de la güirera Teresa Domínguez de la agrupación de Miriam Cruz, no se puede negar que sin ella la orquesta no se siente igual.
   
Su agradable sonrisa, sus sensuales movimientos y su forma particular de tocar la güira, enamoró a más de un mortal, ya que siempre Teresa mantuvo ese ánimo y ese singular sexapel que no tiene ni la propia Miriam Cruz.
   
Si bien es cierto que luego del tema “Cosas de él”, la merenguera consiguió un gran éxito tanto a nivel nacional como internacional, no menos cierto es que Teresa fue parte integral de ese triunfo, ya que siempre aportó lo mejor de ella para complementar la carrera de Cruz.
   

Por casi treinta años las chicas se mantuvieron juntas, por lo que hoy resulta lamentable que el manejador de la artista, Enrique Crespo, no reconozca ninguno de los aportes de Teresa a la agrupación.
   
El propio Crespo ha dicho que la importarte es Miriam Cruz, por lo que es la única que no puede renunciar a la orquesta, aduciendo que por él se pueden ir todos y de inmediato se les buscará un reemplazo.
   
Lo que Enrique debe entender es que no ha sido un objeto o una pieza sino un ser humano, quien lo dio todo desde los inicios de la carrera de Miriam, incluso nunca se separó de ella en momentos cuando la artista estuvo de capa caída, todo esto ligado a la amistad que las une.

Desde nuestra humilde opinión valoramos y enaltecemos el trabajo de esta digna representante del género femenino, quien nos enorgullece grandemente por sus cualidades como artista, músico y ser humano.

Sería casi inverosímil ver a Teresa en una agrupación que no sea la de Miriam Cruz, por la costumbre de tantos años, pero creemos que todavía Domínguez tiene mucho que dar como artista, por lo que debe seguir adelante y no privarnos de su extraordinario talento para manejar la güira.


Por:Marilyn Ventura
Periodista/lainformacion