Pekín. EFE. Unos 16 millones de mujeres chinas han
aceptado casarse con homosexuales chinos por presiones familiares
porque, según los valores tradicionales de las familias chinas, el 90
por ciento de los homosexuales contrae matrimonio, según el resultado de
un estudio publicado hoy el portal “China.org.cn".
El sexólogo Zhang Beichuan, especializado en temas sobre VIH de la
Universidad de Qingdao y autor del libro “Amor Homosexual" (1994), dijo
al portal que las mujeres afectadas están más expuestas a contraer el
VIH además de a la insatisfacción sexual.
También tienen que afrontar la difícil carga de aceptar que sus
esposos sean homosexuales, “y luchan para sobrellevar una situación que
debería ser reconocida”, afirmó Zhang.
Páginas web chinas como “Tierra de Esposas de Gays” o “Esposas de
Gays en Acción”, entre otras, ofrecen servicios legales y psicológicos a
todas aquellas mujeres casadas con homosexuales que lo deseen.
Xiao Yao, creadora de la primera de ellas, con 1.200 usuarios
registrados, dijo hoy a Efe que el objetivo de su portal es proveer
apoyo y consejos a quienes se sintieron engañadas, “lo que les lleva a
falta de confianza en sí mismas, no aceptar su situación y tener miedo
de que la conozca el resto de la sociedad".
Xiao, que se divorció de su esposo homosexual en 2008, afirmó que
las mujeres que consultan su página son de edades comprendidas entre el
final de la veintena y más de 60 años.
“Algunas se dieron cuenta del engaño porque sus esposos no querían
tener relaciones sexuales o porque después de tener hijos empezaron a
evadirlas, mientras que muchas solo se enteraron muchos años después de
casarse”, añadió. Xiao coincidió con Zhang en decir que seguramente no
menos de 16 millones de mujeres chinas están casadas con
homosexuales.
“Otra razón por la que ellos buscan casarse es para tener hijos, lo
que solamente podrán hacer, según la tradición china, si se casan.
Espero que se deje de dañar a tantas inocentes”, finalizó.
En China la
homosexualidad se consideró una enfermedad mental hasta 2001, cuando
empezaron a aflorar clínicas privadas para tratar a aquellos que
expresaran su deseo de cambiar de orientación.
Los tratamientos que
supuestamente “curan” la orientación sexual en forma de terapias y
medicamentos, y que en la década de 1950 consistían en usar descargas
eléctricas, son considerados una estafa tanto por el colectivo
homosexual chino como por los sexólogos ya que el coste medio de una
hora de tratamiento es de 46 dólares.