Viendo, leído y escuchado por los últimos tres días los
inconvenientes surgidos alrededor del Latin Music Tour, me veo en la necesidad
de escribir estas líneas, como presidenta de la Sociedad Dominicana
de Medios Digitales y como periodista, para llamar la atención de las empresas
y colegas que manejan la imagen y relaciones públicas del evento y su sede.
Ayer martes fue el periodista José Nova, y hoy miércoles es el
periodista Cristian Mota, de Orienteinformativo.com, quienes quedan en el
medio de la tormenta por los vaivenes de hechos publicados y que luego son
desmentidos por cada una de las partes involucradas, a fin, cada una por su
lado, de quedar con la mejor imagen posible ante una sociedad que no es tonta y
que sabe que sí hubo problemas en la organización de este evento. Cuando el río
suena, es porque agua trae.
Pero estas líneas no son para analizar ese tema. Como ya
dije, la gente no es tonta, y gracias a Dios existen medios digitales
responsables que se encargan de hacer su trabajo: publicar las noticias, no
inventarlas.
El día de ayer el periodista Cristian Mota entrevistó a Martín
García, el empleado de Acroarte que sufrió un desplante en el hotel Hard Rock
Café, no se sabe por culpa de quién, todavía la “papa caliente” se la están
lanzando de un organizador a otro.
Este señor declaró que se preparaba para
demandar a quienes les hicieron pasar el mal día junto a su familia en Bávaro,
incluso le mostró al periodista las pruebas de su confirmación en el hotel y
negó haber cancelado su asistencia al Latin Music Tour.
Mota se encarga de dar a conocer esta noticia, de la forma
en que como profesional de la comunicación tiene derecho. Sin mentiras ni
inventos, sino como fielmente el protagonista del inconveniente se lo contó.
La respuesta del relacionista público de uno de los
organizadores de la actividad en las redes sociales ha sido llamarle “lambe
tragos”, “chupa medias”, “mediocre”, “resentido”, entre otras perlas al
periodista Cristian Mota, alegando además que el empleado de Acroarte negaba hoy
todo lo publicado por éste.
No se da cuenta el colega que todos saben también que esta
persona se retractó por las presiones que recibió por los involucrados en el
escándalo, que no voy a detallar porque no me interesa dañar ni al Latin Music
Tour, ni a Quepe Tours, ni a Acroarte, ni a Pablo Pou.
Lo que sí me interesa resaltar son las condiciones morales y
profesionales del periodista Cristian Mota, miembro de Sodomedi, quien en todo
su quehacer profesional como periodista independiente es poseedor de una hoja
limpia y ejemplificadora para cualquier periodista, joven o viejo. Así lo
conozco, y es lo que me ha demostrado en los últimos años, en los que me he
visto involucrada en el trabajo del día a día de innumerables medios digitales.
Me interesa decirle al colega Juan Carlos Jiménez, dado a
tirar por el suelo el nombre de personas que tanto como profesionales como
seres humanos tienen mucho que enseñarle, que tomaremos las palabras de quien
las pronuncia y le daremos la debida importancia: ninguna. Además de ser poco
profesional pensar que él es la última Coca-Cola del mundo, expresarse de
manera tan sucia sobre un colega lo único que hace es definirlo, decir quién y
qué es él, un periodista que parece faltó a todas las clases de ética.
Finalmente,
una última sugerencia a mi colega Jiménez, a quien conozco desde que era
pasante en el periódico El Siglo: cuidado con morderse la lengua, porque ese
antídoto no lo han inventado todavía.
Manuela Lora
Presidenta Sodomedi