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Nadie, absolutamente nadie, puede poner en tela de juicio su seriedad e integridad, en el ámbito de la política, una área tan veleidosa y resbalosa, donde muchos se han caido porque no han caminado con pies "de plomo".
El Torito ha dicho siempre que es perredeísta y lo ha demostrado en todas las ocasiones.
Siendo así, ha recibido los afectos de las más altas figuras del partido y del gobierno contrario, a las cuales decentemente ha correspondido, sin que ello signifique en modo alguno que tenga que variar su preferencia ni dar su brazo a torcer.
Ha sido privilegiado por la ex Primera Dama, doña Margarita de Fernández, que lo mantuvo en todas sus fiestas, provocando el celo de artistas y músicos peledeístas.
Le cabe el crédito de haber puesto a bailar seis piezas corridas a Leonel Fernández, en una fiesta de palacio, siendo presidente, algo que no se había visto en el ex mandatario en sus años de gobierno.
Con esa cercanía al poder, muy bien hubiera sucumbido a sus encantos.
Pero Hector Acosta es un hombre serio, apegado a sus creencias y principios, en lo artístico y en lo personal. Por eso nadie lo ha visto en actitudes transfugistas, y lo mismo ha estado con su partido arriba, que abajo.
No es eso acaso algo digno de admirar y reconocer, en un medio tan permeado y contamiado, donde no solo las mujeres, sino también los artistas lo andan "dando por batata"?
Por:merengala.net
By Joseph Ceceres
