Nueva York. EEUU. (SL) -Lamentamos los desagradables y bochornosos incidentes que en la actualidad empañan el buen desenvolvimiento, prestigio, soberanía y democracia de la asociación que agrupa a los cronistas de artes de nuestro país “Acroarte”.
Al igual que yo, la gran mayoría desconocemos en totalidad el contenido de los estatutos y las supuestas razones por la que el comité disciplinario de “Acroarte” dirigido por el Sr. Máximo Jiménez tomara la que calificamos como irrespetuosa, desatinada y poco estratégica decisión de suspender a un profesional que no es un miembro más de la institución en cuestión, estamos refiriéndonos al cronista de arte y ex presidente en varias ocasiones de mayor prestigio e incidencia histórica dentro del arte en nuestro país y extranjero el Sr. “Joseph Cáceres”
El Sr. Cáceres debe tener presente que lo que no te mata te fortalece y que la a punto de finalizar administración del Sr. Máximo Jiménez ha violado principios elementales de la libre expresión, olvidando que la falta de tolerancia resulta ser sinónimo de dictadura, error por la que ha de sentir el látigo del repudio generalizado a su descabellada decisión, porque hasta la razón y el derecho tienen mecanismos racionales y jurídicos para ser reclamados, sin tener que amordazar las críticas unánimes, pues el camino más corto no siempre es el más seguro y recomendable.
Hubiésemos preferido ver una publicación por parte de la entidad y firmada por quien la dirige, desmintiendo y alegando inocencia dentro de un proceso si se quiere legal, sobre las supuestas acusaciones en la que se ha visto envuelta tanto “Acroarte” como el premio y la actual administración, pero lamentablemente prefirieren alimentar aún más las dudas e inclinarse por una desfasada dictadura, pretendiendo castigar a unos cuantos que como el Sr. “Joseph Cáceres” sólo han servido de intermediarios y representantes de lo que equivocadamente o no, pensamos la gran mayoría de los dominicanos sobre lo que fue el último “Casandra” y el primer “Soberano”.
Por: Agustín de la Cruz (Sugar)