Por:Carlos de San Juan
A caído como una salvación la entrada de
Julio Clemente al legendario meridiano El Show del Mediodía, la entrada de Clemente, quien le inyecta dinamismo a este espacio.
Este ha sobresalido entre la nueva camada de presentadores,
siendo el más aventajado, pues demuestra dominio absoluto de lo que hace cuando
está parado frente a un micrófono.
A pesar de no tener ese porte de bonitillo, cae bien entre
los televidentes, los cuales se identifican con su jovial estilo de animación.
Demostró que es de los que saben aprovechar las oportunidades,
solo hay que recordar sus inicios en varios espacios televisivos, cogió el
piso, se pulió y ahí está demostrando lo aprendido.
Ver a Julio Clemente al
mediodía, es una cura, un antídoto que sirve para olvidar por un momento
las cosas agobiante.
Ojala que su trabajo sea tomado en cuenta por la gente de
Acroarte, porque este merece estar nominado en la categoría Animador del año,
en los próximos premios Soberano.