Por: Marilyn Ventura
La tendencia en estos momentos es de siempre lucir imágenes frescas y radiantes a través de las redes sociales y medios digitales.
Lo ideal es colgar fotos con un filtro que aparece como opción dentro de algunas redes y que podría ser utilizado de forma moderada, pero que muchos lo usan desproporcionadamente.
El hecho no es poner un filtro a una fotografía sino modificar la imagen a un punto que parezca otra persona, por los excesos de brillantez y tonos que les aplican.
Ahora bien, en el mundo del entretenimiento y entre famosos es lógico que ante las miradas del mundo, las estrellas muestren su mejor imagen y hagan todo lo posible por proyectarse de manera positiva ante sus millones de seguidores.
El tema que ocupa en estos días la palestra son las fotografías que se han colado en los medios de América Latina de la cantante y actriz Jennifer López en traje de baño y sin filtro o photoshop.
Se dice que ahora JLo está molesta por la aparición de estas imágenes que le están dando la vuelta al mundo, y donde la boricua nativa del Bronx luce una figura esbelta pero no tan nítida como suelen salir sus fotografías.
Entiendo el público no es tonto y sabe reconocer lo real de lo ficticio, sabe distinguir entre lo engañoso de la verdad y por supuesto diferencia una imagen retocada por el photoshop.
Comulgo con el hecho de ofrecer siempre tu mejor versión, pero también comprendo que si en algún momento quieres sentirte vivo debes empezar a salir de tu zona de confort y mostrarte tal cual eres.
