Alex Rodríguez se alejó del béisbol como jugador activo cuando estuvo en su último partido con los Yankees hace alrededor de dos meses. Sin embargo, ya empieza a reflexionar sobre su vida y su legado en el béisbol.
Durante una amplia entrevista con el periodista Jon Warech de la Revista Ocean Drive en Miami Beach, que lo tiene como portada en su nueva edición, Rodríguez conversó sobre su vida después del béisbol, el regreso a la ciudad donde creció, su candidatura a Cooperstown, y qué le espera a él, entre otros temas.
Rodríguez, una de las figuras más controvertidas del juego, se refirió a cómo piensa que los fanáticos deben mirar atrás su carrera.
“En general, yo espero ser recordado como un hombre que trabajó duro, como alguien que amaba el juego y lo dio todo, y sin duda alguien que cometió errores, pero regresó después”, declaró el dominicano a ese medio de comunicación que reseña su intervención en su página de internet (oceandrive.com).
Rodríguez, que pasó 22 años en Las Mayores como uno de los más talentosos jugadores, dijo que espera algún día ver su nombre consagrado con los grandes del juego en el Salón de la Fama de Grandes Ligas.
“Por supuesto que me gustaría, pero no es a mí que me toca decirlo”, subrayó quien ahora está su nuevo papel como instructor con los Yankees.
Desde que se retiró, el expelotero de 41 años, ha estado viviendo más una vida de bajo perfil con su familia en Miami – donde creció y fue a la universidad – algo que él dijo es importante en esta etapa de su vida.
“Todavía estoy procesando todas las cosas, pero una de las ventajas es que estoy alrededor de mis hijas todo el tiempo, y ser capaz de dormir los fines de semana. Las dos cosas que me estoy centrando en la mayor parte es pasando el tiempo con mis niñas y conseguir involucrarme en la comunidad con las organizaciones, como el club de Niños y Niñas y la Universidad de Miami”, agregó.
Apuntó que contribuirá con ese centro de estudios, como una forma de devolverle lo que hicieron por él.
“Había una gran cantidad de personas que han hecho contribuciones importantes en mi camino hasta Las Mayores, y una de las cosas que pienso ahora es ser capaz de devolver y ayudar a los niños al igual que me ayudaron a mí”, destacó.
Sostuvo que lo más difícil en su carrera fue decir adiós al juego tras 20 años.
“Decir adiós al juego fue lo más difícil que he tenido que hacer, pero tengo grandes recuerdos de ese último día. Ese fue un día especial. Tengo muchas ganas de volver al Yankee Stadium como un asesor”, indicó.
Rodríguez, que se perdió toda la temporada de 2014 por violar el reglamento antidopaje del béisbol, dijo que va a extrañar del béisbol los cuatro turnos al bate todos los días, los aficionados y a ese equipo.
El cuarto más grande productor de jonrones en la historia de las Grandes Ligas con 696, señaló que hay tres momentos que definen su carrera.
“Creo que para mí hay tres: el día que fui reclutado de la escuela secundaria, el Campeonato Mundial 2009, y toda la temporada de 2015, la remontada. Con toda la adversidad enfrenté a los 40 años, volver, y ser capaz de llegar a la post-temporada cuando éramos grandes perdedores, ese año fue especial”, dijo.
Ante la pregunta de si hay algún lanzador que lo haga sentir feliz por no tener que enfrentarlo más, mencionó a su compatriota Pedro Martínez.
“Cuando estás 41, todos ellos. Pero yo diría que Pedro Martínez en su mejor momento. Él es uno de los más grandes competidores de todos los tiempos fue feroz en el montículo, e iba por ahí para destruirte todas las noches. Tenía tres lanzamientos casi imbateable, más la combinación de su repertorio y su competitividad”, puntualizó.
Los Yanquis todavía tienen que pagarle en 2017 el último año de su contrato por 10 temporadas y 275 millones de dólares.
Elegido en 14 ocasiones al Juego de Estrellas, Rodríguez bateó .200 con nueve jonrones y 31 remolcadas en 65 partidos en su última campaña. Se retiró con 696 cuadrangulares en su carrera, sólo superado por Barry Bonds (762), Hank Aaron (755) y Babe Ruth (714) en la lista histórica.