Estimado Juan Soto


Por Berny Díaz 


Como compatriota dominicano, quiero dirigirme a ti con admiración y respeto. 


Eres un ejemplo de disciplina, esfuerzo y excelencia. Tu trayectoria te ha llevado a un nivel sin precedentes: no solo eres Grandes Ligas, eres una figura mundial de todos los deportes, el más cotizado y el mejor pagado en la historia.


Por eso, quiero compartirte una reflexión desde el corazón. Tú no eres una persona de andar en discotecas; tu esencia y logros van mucho más allá de eso. 


La envidia es ciega, sorda y muda, y siempre habrá quienes no entiendan lo que representa tu grandeza. 


Si deseas disfrutar de música o artistas de tu agrado, considera hacerlo en un ambiente privado, rodeado de tu familia y amigos más cercanos.


No es justo que, después de una trayectoria tan brillante y tras alcanzar una hazaña histórica, se te vea en un lugar que no refleja tu verdadero nivel. No lo necesitas, y ese no es tu estilo.


Entendemos que eres joven y estás disfrutando tus vacaciones, pero te pedimos que mantengas la misma prudencia que te ha caracterizado hasta ahora. 


No olvidemos el triste recuerdo del intento de asesinato a nuestro querido David Ortiz en un bar de Santo Domingo, un evento que marcó a toda nuestra nación.


Tu legado es un orgullo para todos los dominicanos, y queremos seguir viéndote brillar en el lugar que mereces.